Amor obsesivo
Las personas con trastorno obsesivo-compulsivo pueden presentar este comportamiento: se caracterizan por una baja autoestima y una necesidad permanente de que los demás llenen sus vacíos emocionales y resuelvan todos sus problemas. También se sienten atrapados por sus miedos y marcadas inseguridades. También son individuos que en un momento dado pueden ver o conocer a alguien y empezar a obsesionarse.
Personas con trastornos de apego: este es otro factor llamativo que también explicaría el comportamiento obsesivo en el amor, donde alguien proyecta en sus relaciones los trastornos de apego originados en la primera infancia.
Erotomanía o síndrome de Clerambault: se trata de un trastorno en el que alguien piensa que hay una persona tremendamente enamorada de él o ella. Esto le lleva a mostrar conductas de seducción, acoso y persecución.
Todo lo que nos ocurre en la infancia tendrá repercusiones en nuestras relaciones en la vida adulta.
Cómo afrontar la obsesión por una persona
Al igual que ocurre con otros trastornos psicológicos, es importante tratar el problema. Pero, para ello, debe ser la persona que sufre el trastorno obsesivo quien quiera ponerle fin, quien dé el paso definitivo hacia esa búsqueda de ayuda profesional y especializada. Si otras personas lo fuerzan, no será efectivo.
En cambio, si somos nosotros mismos los que hemos caído en ese estado de obsesión por alguien, es el momento de tomar conciencia y afrontar el problema. Estos son los pasos que debemos dar.
Poner distancia
Aléjate del problema y deja que la persona se vaya. Esto es especialmente importante si has empezado a presenciar comportamientos de acoso, persecución y vigilancia. Asume, acepta y reflexiona sobre el hecho de que su comportamiento no es correcto y toma una decisión firme: detener esta dinámica. Por respeto a la otra persona y a ti mismo.
Ponte en el lugar de la otra persona
Mira dentro de ti y comprende la posición de la otra persona. Empatiza y entiende que el amor no es sinónimo de posesión. Si la posesión entra en escena (y se convierte en una necesidad para ti) es una señal de alarma de que se trata de un comportamiento insano, peligroso y perjudicial para todas las partes.
Confianza en uno mismo
Trabaja tu autoestima y confianza en dos sentidos. Tanto en ti mismo como en los demás. Entiende que la baja autoestima es la causa de este tipo de trastorno. Por tanto, elige actividades que te ayuden a sentirte bien, que te aporten bienestar y confianza en ti mismo para favorecer tu desarrollo emocional y personal.
Sé activo
Elige una afición que te guste, porque además de desarrollar una habilidad que te dará más confianza, te ayudará a superar esa sensación de impotencia y abatimiento, canalizando toda tu energía en destacar en esa actividad. Haz algo de deporte, ponte nuevas metas y abre un poco más tus círculos sociales. Intenta relativizar tus pensamientos, libera tu mente…
Pide ayuda
Pide ayuda profesional a tus amigos y familiares. Un profesional puede escuchar tus problemas y buscar la raíz de los mismos para acordar un plan de acción. La atención individualizada o los grupos de apoyo suelen dar muy buenos resultados en estos casos.
Por otro lado, si tienes un círculo de amigos positivo, el impacto también será muy enriquecedor si das el paso y te abres a ellos para iniciar nuevos planes, actividades con las que canalizar la ansiedad y esos pensamientos intrusivos que dan forma a la bola de la obsesión.
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