El hombre moderno
El organismo humano, como el de todos los mamíferos, posee un alto nivel de complejidad, ya que cada órgano, tejido, aparato y sistema se encuentra en una compleja interrelación que lo mantiene en funcionamiento. A lo largo de la historia, han surgido movimientos artísticos y científicos para admirarlo e intentar comprenderlo, especialmente en la época del humanismo en Grecia y el Renacimiento europeo.
Superioridad a otros animales
El ser humano es superior a todos los animales, por el hecho del uso de la razón. El cerebro humano es grande en comparación con el de otros animales. Es filosófico por naturaleza y puede controlar sus instintos.
Esta capacidad tiene sus problemas. Entre ellos, cabe destacar que el ser humano, al ser más mente que cuerpo, es menos ágil que los animales y más delicado.
Boca
La boca, también conocida como cavidad bucal o cavidad oral, es la abertura del cuerpo a través de la cual se ingieren los alimentos. Está situada en la cabeza y constituye la mayor parte del aparato estomatognático, así como la primera parte del aparato digestivo. La boca se abre en un espacio anterior a la faringe llamado cavidad oral o bucal.
La boca humana está cubierta por los labios superior e inferior y desempeña funciones importantes en diversas actividades, como el habla y las expresiones faciales, como la sonrisa. La boca es un gran indicador de la salud de un individuo. La mucosa, por ejemplo, puede aparecer más clara, más pálida o con manchas blancas, lo que indica proliferaciones epiteliales.
En la boca se pueden distinguir tres tipos de mucosa.
De revestimiento simple: que presenta submucosa.
Masticatoria: Con probable ausencia de submucosa, queratinizada o paraqueratinizada y en contacto directo con el tejido óseo.
Especializada: Presente en ciertas regiones de la lengua. Se refiere a la mucosa relacionada con los receptores del gusto.
Dientes y dentición
Los dientes son estructuras tisulares mineralizadas que comienzan a desarrollarse a una edad temprana y que nos ayudan a masticar los alimentos para una buena digestión. El diente realiza la primera etapa de la digestión y también participa en la comunicación oral.
Básicamente, se pueden reconocer dos partes en el diente: la corona, la parte visible cubierta por el esmalte dental, y la raíz, que no es visible en una boca sana.
Los dientes, ordenados desde el centro hacia los maxilares son: incisivos que cortan, caninos que desgarran, premolares que trituran y molares que muelen.
Hablando de la dentición, que es el conjunto de dientes de la boca humana, hay 4 dientes que se clasifican según su corona y función
- Incisivos (8 dientes): dientes anteriores con un borde afilado. Su función principal es cortar los alimentos. Tienen una corona cónica y una sola raíz. Los incisivos superiores son más grandes que los inferiores.
- Caninos (4 dientes): Con forma de cúspide puntiaguda. Se llaman colmillos en otros animales. Están situados junto a los incisivos y su función es desgarrar el alimento.
- Premolares (8 dientes): Tienen dos cúspides puntiagudas. Facilitan la trituración de los alimentos.
- Molares (12 dientes): Cúspides anchas. Tienen la misma función que los premolares. La corona de este tipo de dientes puede tener cuatro o cinco prominencias, así como dos, tres o cuatro raíces. Son los más grandes.
- En total, un humano adulto tiene una dentición de 32 dientes.
En comparación con los pueblos arcaicos, los humanos modernos tienen dientes más pequeños. Esto da lugar a una dentición más pequeña y retraída, lo que hace que el resto de la línea de la mandíbula destaque, dando lugar a una barbilla a menudo bastante prominente.
Alimentación
Los humanos son omnívoros. Tienen 32 dientes en la boca, incluyendo 8 incisivos, 4 caninos, 8 premolares y 12 molares.
La dentición humana está adaptada para desgarrar, cortar, triturar y agarrar.
Cuando hay algo en la boca humana, las glándulas salivales ayudan a masticar y tragar el alimento.
Lenguaje
El ser humano, como ya se ha dicho, es superior a los demás animales por su «mente» y su «razón».
El ser humano se comunica más que nada por la lengua. Su lengua es gorda, en la garganta tiene lo que se llama «cuerdas orales» y el «lóbulo temporal». Juntos, forman la lengua del ser humano.
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